Deliciosos y sencillos muffins de pera con crumble
Hay recetas que se disfrutan desde que estás cortando la fruta, y esta es una de ellas. Estos muffins combinan el dulzor suave de la pera con el aroma y sabor que solo Vainilla Molina le puede dar. Son fáciles de preparar, no necesitan nada extra y el crumble de encima les da ese toque crujiente que los hace sentir muy especiales. Si te gusta hornear con calma y aprovechar lo que tienes a mano, esta receta es para ti.
1 ½ tazas de harina de trigo
1 cucharadita de polvo para hornear
¼ de cucharadita de bicarbonato de sodio
¼ de cucharadita de sal
Dos piezas de huevo
½ taza de azúcar
½ taza de yogurt natural o griego
¼ de taza de aceite vegetal
Un chorrito de Vainilla Molina
1 pera madura, pelada y picada en cubitos pequeños
Para el crumble:
2 cucharadas de mantequilla fría
¼ de taza de harina
2 cucharadas de azúcar mascabado
1 pizca de canela
1. Precalienta el horno a 180 °C y prepara un molde para muffins con capacillos.
2. En un tazón pequeño, mezcla la harina, el azúcar y la canela. Agrega la mantequilla fría y mezcla con las yemas de los dedos hasta obtener una textura arenosa con pequeños grumos. Refrigera mientras haces la mezcla base.
3. En un bowl grande, mezcla la harina, el polvo para hornear, el bicarbonato y la sal.
4. En otro bowl, bate el huevo con el azúcar. Agrega el yogurt, el aceite y un chorrito de Vainilla Molina. Mezcla bien hasta que quede uniforme.
5. Incorpora los ingredientes secos a los húmedos con movimientos envolventes, sin sobrebatir. Agrega la pera picada al final.
6. Reparte la mezcla en los moldes, llenando hasta ¾ de su capacidad. Coloca un poco de crumble encima de cada muffin.
7. Lleva al horno de 20 a 25 minutos, o hasta que al insertar un palillo salga limpio y el crumble esté ligeramente dorado.
8. Deja enfriar en el molde 5 minutos y luego pásalos a una rejilla.
9. Puedes espolvorear canela o un poco de Azúcar Glass Postrelicioso.
No necesitas una ocasión especial para hornear algo rico. Estos muffins son la excusa perfecta para usar esa fruta que ya está muy madura o simplemente darte un gusto. La textura, el sabor y ese toque de crumble lo hacen todo. Ojalá te animes a probarlos y que se queden contigo como una receta de confianza.
