Delicioso cheesecake casero con manzana, caramelo y nuez.
Hacer este cheesecake de manzana, caramelo y nuez es una de esas experiencias que disfrutas desde el primer paso. Es muy fácil de hacer y tiene esos detalles que hacen que el resultado se sienta muy especial: el aroma del horno, la mezcla cremosa con un chorrito Vainilla Molina y las manzanas cocinadas en mantequilla hasta quedar brillosas. Lo preparas una vez y ya no lo olvidas nunca, porque el sabor es justo el punto medio entre algo dulce, reconfortante y con sabor casero.
Para preparar este delicioso cheesecake de manzana necesitaremos los siguientes ingredientes:
Para la base:
1 ½ tazas de galletas molidas tipo María o de canela
¼ de taza de azúcar
¼ de taza de mantequilla derretida
Un chorrito de Vainilla Molina
Para el relleno:
450 g de queso crema (a temperatura ambiente)
¾ de taza de azúcar
2 piezas grandes de huevo
Un chorrito de Vainilla Molina
½ cucharadita de canela molida
½ taza de crema agria o yogurt natural
Para la capa de manzana:
2 manzanas grandes (tipo gala o fuji), peladas y en rebanadas finas
2 cucharadas de mantequilla
2 cucharadas de azúcar morena
½ cucharadita de canela
Un chorrito de Vainilla Molina
1. Precalienta el horno a 170 °C y engrasa un molde desmontable.
2. Mezcla las galletas molidas, el azúcar, la mantequilla y un chorrito de Vainilla Molina. Presiona sobre el fondo del molde y hornea por 8 minutos.
3. En un bowl, bate el queso crema con el azúcar hasta que esté suave. Agrega las piezas de huevo, luego un chorrito de Vainilla Molina, la canela y la crema agria. Mezcla hasta integrar.
4. En un sartén, derrite la mantequilla con el azúcar morena, la canela y un chorrito de Vainilla Molina. Añade las manzanas y cocina 5–7 minutos hasta que estén suaves y brillantes.
5. Vierte el relleno sobre la base ya horneada. Distribuye las manzanas encima y reserva algunas para decorar.
6. Hornea por 45–50 minutos o hasta que el centro esté firme pero ligeramente tembloroso.
7. Enfría completamente y refrigera al menos 4 horas.
8. Decora con la salsa de caramelo y las nueces antes de servir.
¡Delicioso! Este cheesecake es un recordatorio de lo bien que se siente ponerle un chachito de corazón en una receta que endulza hasta el día más nublado.
