¾ de taza de mantequilla salada ablandada a temperatura ambiente
¾ de taza de azúcar
¾ de taza de Azúcar Glass Postrelicioso
2 piezas de huevos
Un chorrito de Vainilla Molina Cristalina
2 ½ tazas de harina para todo uso
½ cucharadita de levadura en polvo
½ cucharadita de sal
Colorante comestible en gel rojo y verde
Confitería de colores de temporada
Opcional: Una cucharadita de ralladura de limón
1. Mezcla la mantequilla, la azúcar y la Azúcar Glass Postrelicioso en polvo en una batidora hasta tener una masa suave y esponjosa.
2. Revuelve tu masa con los huevos, el chorrito de Vainilla Molina, la harina, el polvo de hornear y la sal.
3. Divide la masa en tres bolas del mismo tamaño.
4. Regresa ⅓ de la masa al bowl y agrega de 5 a 10 gotas de colorante rojo, revuelve hasta que la masa tome un color rojo uniforme.
Repite el proceso con otro ⅓ de la masa y el colorante verde.
5. Aplana cada bola de masa y envuélvela en plástico para que repose en el refrigerador por 20 minutos.
6. Estira las masas sobre papel encerado y forma rectángulos iguales.
Apila los rectángulos de masa y recorta los lados más largos y desiguales.
7. Usa el papel encerado para enrollar cuidadosamente la masa, y refrigérala durante 2 horas.
8. Cuando se enfríe la masa, pásala por una bandeja con las chispas de tu elección. Presiona con algo de fuerza para que se peguen a la masa.
9. Rebana la masa y hornea las galletas a 180° durante 10 minutos.
10. Déjalas enfriar antes de servir o empacar.